Cuando la
luz se apague, amor mío, ven a buscarla a Chile.
Las
sombras más oscuras que la noche, aquí se diluyen
En
claridad. Esperando: brillantes como astros.
¿La ves?
Mira hacia arriba. Los cielos del mundo son uno.
Cuando la luz
se apague, amor mío, ven a buscarla a Chile.
Para el
desamparo sin consuelo ni refugio, aquí se abren
Las
puertas. Al compartir cada renuncia.
¿La ves?
Mira hacia dentro. Los infiernos del mundo son muchos.
Cuando la
luz se apague, amor mío, ven a buscarla a Chile.
Si a la
sangre roja de los hombres y mujeres le falta calor azul,
Aquí se
inventaron los colores. Y las distancias ya no dan miedo.
Cuando la
luz se apague, amor mío, ven a buscarla a Chile.
PEDRO VALIENTE
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